domingo, 21 de marzo de 2010

ESE OFICIO DE SOGUERO

A Romeo Risso, mi padre

Soguero, tu profesión.
Cuasi diría que tu cencia,
hecha a base de’sperencia,
de güen pulso y corazón.
Es un rulo de ilusión
cada desvire de tiento;
mazetiar es tu contento
al ver asomar la grana,
en la soga que desgrana
su procedencia y portento.

Con una pava a la par
y ensiyao el mate amargo,
te pasás los ratos largos
con tu oficio de trenzar.
Mañana habrás de cueriar
dispués, lonjiarás el cuero,
y ya oraiao, el mesmo esmero
pa’ mazetiarlo pondrás,
¡porque tu orguyo empeñás
al trabajar de soguero!

Cuchiyos bien afilao,
leznas, chairas y mordaza;
mazeta de crioya traza
y varios sacabocao;
piedras, pa’ filos variao
a más de otros elementos,
son el crioyo firmamento
pa’ tus artes de paisano…
¡Herramientas que tus manos
forjaron son sentimiento!

Tanto hacés un maniador
como una juerte encimera,
o de cuero -a la’sidera-
le hacés una argoya flor;
algún bozal potriador,
un lindo juego de rienda,
un chicote pa’ la hacienda
o algún vistoso cabresto…
y te va sobrando resto
p’hacer cualquier otra prienda.

Ese oficio de soguero
te nace de los ancestros,
esos antiguos maestros
de nuestro tiempo primero.
Sos un genuino heredero
de un saber que’s tradición,
porque’n verdá es condición
que no es de tuitos los crioyos,
y te van sobrando royos
pa’ esa gaucha profesión.

Por eso que día a día
tu ispiración se recrea
al hacerle a una manea
un bordao con fantasía,
o haciendo con simetría
los dibujos a un culero…
Por tuito eso, por campero
me’ntropiya tu badajo.
¡Ta’ que’s pavada ‘e trabajo
ese oficio de soguero!
(17/08/1976)

- Grabado por Rómulo Nahuel
- Incluido en "El Habla Paisana" de Rafael D. Capdevila

No hay comentarios:

Publicar un comentario