lunes, 7 de marzo de 2011

AMANECIENDO

1
Cuando el sol dentra a dejar
el fortín del horizonte,
comienzan dende los montes
los pájaros a cantar;
mientras que va a coloriar
las nubes del firmamento,
me doy cuenta en el momento
que las estreyas son ralas,
y una lechuza, en sus alas,
cierra la noche en lamentos.

2
Cuando empezaba a clariar
se oyó balar un ternero,
noche’ra cuando el tambero
se levantó pa’ ordeñar;
el boyero ha de yevar
al “Camino Rial” los tarros,
y ata a las vara del carro
a un lindo cabayo overo
mientras prepara un ladero
pa’ que se afirme en el barro.

3
Parao del rancho en la puerta
arriba de un esquinero,
dá su saludo el hornero
al sol, que ricien dispierta.
El campo se pone alerta,
se sacude la pereza,
y silba entre la maleza
una perdiz copetona
y un carancho vuelo toma
dispués de alzar una preza.

4
La extensión que se dispierta
va recobrando la vida,
y una cerrazón tupida
hace las formas inciertas.
Ya con la tranquera abierta
de los potreros del cielo,
comienza su manso vuelo
el sol, en un nuevo día,
pa’ emponchar con alegría
a las cosas de’ste suelo.
(4/06/1972)