lunes, 22 de octubre de 2012

A LUIS MARÍA LAURENCENA


A la memoria del querido “Vasco” que falleciera en 1978

Como un tizón trasfoguero
que se consume en su brasa,
se me apagó tu crioyaza
presencia de compañero.
Te había pialao lo campero,
te había amadrinao la tierra,
con la beyeza que’ncierra
nuestra costumbre paisana,
pero en edá muy temprana
el destino te destierra.

Solo una cosa segura
hay una vez que nacemos,
y es que algún día rumbiaremos
de’ste pago, a otra yanura.
En tus amigos perdura
tu imagen, “Vasco” güenazo.
Jue cimbrón de todo el lazo
que hace temblequiar la mano
saber que siendo temprano
se avecinaba tu ocaso.

Será que pa’ndar camino
hacía falta algún resero,
¡y que mejor que un surero
pa’ repechar el destino!
Mirá hermano, solo atino
a decirte con voz plena,
que anque tu ausencia me apena,
mientras esista un fogón,
latirá tu corazón
¡Luis María Laurencena!
                                        (18/02/1980)

No hay comentarios:

Publicar un comentario